Te quiero valiente

La perfección es algo que, aunque todos buscamos, sabemos que no vamos a encontrar; sin embargo, hay una característica adicional de este estado, que mantiene oculta e invisible a nuestros sentidos, porque ellos nunca lo podrán experimentar, pero esta característica se desnuda ante una lógica común y un poco de creatividad: es la facilidad. Si se piensa un poco ser perfecto te hace la vida fácil. Tener siempre la respuesta correcta, la actitud atinada y la palabra acertada permite tener un terreno allanado en el camino de la existencia. Al saber esto, a los terrenales solo nos queda una opción, un único recurso: Ser valientes.

Debemos ser valientes porque nos vamos a encontrar una serie de dificultades que, a pesar de no tener las armas para enfrentarlas, no nos pueden detener. Además, nuestras realidades nos plantean la búsqueda de ideales altos, elevados, casi inalcanzables y, lo único que nos pone un paso más cerca de ellos, es la valentía.

Cada día es un inicio y cada inicio tendrá dificultades afuera, puestas por los demás, por las circunstancias que en todo lo nuevo se tornan adversas; pero también aparecerán las dificultades de adentro, las más complejas y complicadas: el no sé, no entiendo, no conozco, tengo miedo, será difícil para mí… ahí, más que nunca, TE QUIERO VALIENTE.

 

 

 

20/11/17